Último martes del año y yo aún tenía cosas por enseñaros. Este año el ganchillo le ha robado el protagonismo al punto. Si, también he estado ganchilleando un sonajero león y un elefante de ganchillo para el bebe:
El patrón del elefante me llevó por el camino de la amargura. Dehice dos veces. A mi me pareció un patrón muy poco intuitivo. Carecía de toda lógica geometrica o de una simetría que te permitiera saber como iba a cerrar la vuelta. Asi que no quedaba otra, que seguirlo "fil per randa" o sea, letra a letra, si no querías descontarte ningún punto. Reconozco, eso si que la solución de la barriguita y las patas es muy ingeniosa. El mio tiene cada pata de un color. Ya me pareció al empezarlo que la lana iba a ser justa. Deje a punto las orejas y cruzé los dedos para que llegara por lo menos hasta las patas. Confieso: a la trompa le faltan un par de vueltas.
El león fué otro cantar. Seguí más o menos un patrón de sonajero, pero con algun canvio. No separé la cabeza del mango, por ejemplo. La cabellera y las orejas son de cosecha propia. Si lo volviera a tejer, lo haría a la inversa: de la cabeza a los pies. Los augmentos me quedan mucho mejor que las disminuciones y la coronilla no ha quedado muy bien rematada. Algún día reescribiré el patrón para que podais tener vuestro león.
Y sin tener la intención de ello, voy juntando una selva de amigurumis. A ver que animal cazo en el próximo safari!
qué chuladas de peluches!!!
ResponderEliminarA mi me chiflan! :D
ResponderEliminarEl elefante es lindísimo. A ese pequeño le van a gustar mucho los bichitos gancheteados por su mamá!!!
ResponderEliminar