100 años

Si hay algo por lo que recordaré este enero del 2025 será por el aniversario de mi abuela.

Mi abuela cumplió 100 años, y sus hijos, nietos y bisnietos, que vivimos (en su mayoría) a más de 600 km de ella, decidimos hacer ese viaje, ni que fuese solo por un fin de semana para ir a verla y celebrarlo juntos.

Este enero leí bastante, tejí un poco y bordé mucho. En un bastidor de 30 centímetros bordé nuestros nombres en un gran árbol. Porque aunque ella aún está bien y aún puede llevar la cuenta, llegará un día en que nombres y fechas estarán borrosos en su memoria y tenerlos allí bordados le ayudará a recordar qué hermosa familia ha crecido bajo su tutela. Podéis ver el bastidor acabado en el post de instagram

Ya sabéis lo que me gustan a mí los regalos hechos a mano. Y este mes que dediqué a hacer uno para mi abuela, llegó también uno sopresa para mí. (Yo también cumplo en enero) Una preciosa funda de libro cosida por las manos de ganxetades

Cumplí con mis objetivos lectores, pese a que dos de esos libros, de sendos clubs de lectura, los acabaré en febrero.

Avancé bastante en el proyecto de tejido que me ocupa las manos este mes, el cuello panot. Cómo no quería llevármelo al viaje, empecé a última hora un gorro con restos y un patrón gratuito de purl soho, el best friend hat.

Lo terminé en el viaje de vuelta, pero quedaba algo corto y como lana aún tenía, deshice la coronilla y le añadí una pulgada de largo. Ya está rehecho y acabado. Las fotos con luz artificial siempre son difíciles, pero me puede la impaciencia de las autoimposiciones. Cómo la de escribir cada martes de final de mes. Incumplida de momento, porque ya es miércoles. Así que ahí queda la foto del gorro que encabeza este resumen de lo que estuvo entre mis manos este enero.